¡Me voy a cambiar de familia!

Esta tarde las niñas han vuelto a casa de tierra hasta las cejas, un amiguito del cole se va a otro país y ofreció una merienda en el parque.
Un parque lleno de arena, grifos, cubos... en fin os podéis imaginar!!

Con el tema de la dermatitis atópica, la mayor y la pequeña no se bañan todos los días, mientras que V. puede dar rienda suelta a su amor por las bañeras con frecuencia (casi) diaria.

El baño es mucho más divertido que la ducha, aunque con los tiempos que corren hay que ahorrar agua, por lo que a menudo intentamos reconducir el tema limpieza a un paso más o menos rápido por debajo de un chorro de agua tibia.

Pero esta tarde libertad de elección, así que P. prefiere ducha rápida y V. y B. baño.
La que montaron las dos... en un segundo el suelo parecía una piscina.
Regañé a las dos gamberras, claro que sí.

Al qué V. soltó una de sus amenazas (que no oía desde hace tiempo):

¡Me voy a cambiar de familia!

Lo siento hija mía, papá te quiere tanto que a pesar de ser una petarda y merecerte un castigo, no voy a dejar que cambies de familia y punto.

El castigo fue que el documental sobre leones cuya visión tuvieron que interrumpir ayer por la tarde se quedó detrás de la pantalla apagada.

Y nada ya veis, con cinco años de que va la mediana :-)))

Pero a la hora de cenar la pasta que preparó papá estaba tan rica, roja de tomate, con los hilos de parmesano fundido que atrapaban cada espaguetis, que V. decidió que el cambio de familia podía retrasarse...

Comentarios

  1. Como padre de un única hija , de momento y hasta que el CCAA nos tenga a bien asignar otra , no puedo valorar objetivamente la tozudez y el carácter de ésta .
    Cinco años dices que tiene V. , pues con cuatro Alexia ya se nos rebota con lindezas varias.
    Lo cierto es que lo del tema familia todavía no lo ha tocado porque , aunque su origen lo tiene claro , creo que no se lo ha planteado , pero cuando llegue vamos a flipar.
    De que no voy a ser amiga tuya o no te voy ha hacer más dibujos o no te voy a querer , ya estamos más o menos acostumbrados , aunque nos enoja muchísimo por su actitud rebotona y no conseguimos rectificarla.
    Ya veo que nos queda poco para que el tema se complique más y espero tener el temple suficiente para responder con habilidad .
    Otro signo de su carácter es cuando nos exige que vayamos donde está ella , buf cristo al canto .Como padre me siento obligado a no ceder ante sus exigencias anárquicas e intento negociar acercándome un poco como quién no quiere la cosa y ofrecerle que ella recorra el resto del camino , pero pocas veces lo consigo , con lo que el berrinche se eleva a cotas impresionantes .
    Luego , solucionado todo con disculpas y abracitos , pienso que será de nosotros cuando sea más mayor y con una segunda con un referente como ella .

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Gracias por dejar tus palabras. Los comentarios se agradecen y animan!

Entradas populares de este blog

Nadie es prescindible

El dragón que devora el sol