Cocinar con niñas demasiado espabiladas


El otro día hice una lubina a la sal grandota, estaba deliciosa pero quedaron, de una limpieza atenta, bastantes migajas.

Así que al día siguiente, para aprovechar del pescado, decidí hacer un risotto que podría llamar

Risotto de calabacín y anchoas con migajas de lubina a las sal

No es nada complicado. Las cantidades son para 5 personas.

Cuando ya tengáis lavados dos calabacines y, sin quitar la piel, los hayáis cortados en lonchitas, junto con media cebolla también cortada, poned en una sartén amplia: aceite, ajo y una media lata de anchoas a fuego bajito, añadid una lata pequeña de atún.

Cuando las anchoas se hayan desecho añadid los calabacines y la cebolla y a fuego no muy fuerte dejad unos 10 minutos (añadid un poco de agua si se pega).
En otro cazo preparad un litro y medio de caldo de verduras y pollo (cómo tenemos prisa y no nos gusta complicarnos la vida, con un par o tres de pastillas nos conformamos) el caldo que esté bien caliente!

Calculad un puñado de arroz por persona o lo que os apetezca.
Añadid el arroz a los calabacines, dejando el caldo a parte y dando vueltas al arroz para que no se pegue y queme.
También pueden añadirse unas alcachofas en aceite cortadas en trozos pequeños.

Al cabo de unos dos o tres minutos empezad añadir el caldo, dando vueltas.
Añadid también azafrán en polvo disuelto en un poco de agua.
Añadid las migajas de la lubina (o de cualquier pescado, la idea es de aprovechar el pescado que ha quedado del día anterior)
Probad y si le falta de sal, a vuestro gusto (las anchoas y el atún tiene ya bastante sal, así cómo el caldo obviamente).

Una de las diferencias entre la paella y el risotto es que a éste hay que darle vueltas a menudo y añadir el caldo poco a poco, según necesidad y gusto para que quede no demasiado caldoso, pero tampoco seco.
Cómo el caldo se añade poco a poco, dando vueltas, es más fácil no equivocarse.
Dejad a fuego alegre unos diez minutos o poco más.
Apagad el fuego, tapad y dejad unos minutos.
Rallad un poco de parmesano (preferiblemente, pero si hay otro queso que os gusta sin problemas)

Servid caliente en el plato con parmesano por encima.

María y yo nos chupamos los dedos.
¿Y las niñas?
¿supieron apreciar el manjar preparado con tanto amor por su padre?

Lo primero, empezaron a apartar los calabacines, acto seguido a proferir comentarios no precisamente positivos, hasta que P. se puso de pié y soltó:

"Manifestación!! Manifestación!! Este arroz está asqueroso!

inmediatamente seguida por la hermana

Asqueroso!! Asqueroso!!! Manifestación!!

El papá profundamente entristecido mira la mamá, que se servía el bis comentando un consolador: "está bueníiiiisimo"
También el papá, para consolarse, pidió más Risotto, mientras la mamá le decía a P.
"si te encanta el puré de verduras y allí hay calabacín..."

La que montó el pollo acabó su porción de risotto y entre la sorpresa general de los adultos presentes se acercó a la sartén y....

se sirvió otro plato!!!
¿os lo podéis creer¿

En fin, que acabamos la comida riéndonos con gusto.

La situación era propicia para gastar bromas, por lo que decidí hacerle a la bicho mayor una pregunta de las más serias.
Agárrense por que lo que van a leer es la transcripción fiel de lo que allí, en la cocina, se escuchó:

P. hija mía, dime ¿eres feliz?
NO.

¿No eres feliz? [cara de sorpresa del papá y de la mamá, intercambio rápido de miradas ligeramente preocupadas y otra pregunta] ¿y qué te falta para ser feliz?
UNA FAMILIA

oh, una familia... y ésta que tienes aquí ¿qué es?
PUES, es una escuela, o un orfanato... estoy en un orfanato.

¿cómo?
SI [risita de la gamberra, mirada pillina y con un tonito de tomadura de pelo]
sí, estoy en un orfanato y estoy esperando que mi familia me venga a buscar, vendrán en enero.

¿en enero...? ¿y los conoces?
SI [ más sonrisitas, esta vez ya descaradas] "mi familia serán los Reyes Magos, y los estoy esperando" y risas...

Las risas por la manifestación anti-risotto ya quedaron eclipsadas, ya os lo podéis imaginar... la broma siguió con comentarios sobre expectativas de regalos infinitos, del fin del regañar etc. etc.

Pues... no os escondo que María y yo nos quedamos bastante sorprendidos, ya veis el nivel, por una brujilla de ocho años, es para dejar tieso a cualquiera :-))

Ahora, reflexionando, con estas enanas tan sobradamente espabiladas
no habría que replantearse la idea ya comúnmente admitida de que hay que contarles todo, explicarle todo¿?

A ver con que nos deja en evidencia la próxima vez :-))))
En Italia se dice que "utilizarán nuestra cabeza cómo plato para comer espaguetis" ... estamos en tema:

Buenas noches y buen provecho!

Comentarios

  1. Bueno Roberto me he reido un monton con lo de la manifestación, que ocurrencia!!!!, seguro que el risotto estaba buenisimo pero esas salidas de tus hijas lo superan!!

    Saludos

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Gracias por dejar tus palabras. Los comentarios se agradecen y animan!

Entradas populares de este blog

Nadie es prescindible

El dragón que devora el sol