Noche serena...

Blanca está mejor, aunque muy ñoña...

Esta tarde la he tenido en brazos un buen rato, sentado frente a esta pantalla, ella sentada en mis piernas, abrazada, la rodeaba con mi brazo izquierdo y estaba quieta y tranquila, disfrutando sin duda... con dos dedos de la derecha iba tecleando, mientras podía darle besitos y una música dulce salía por los altavoces, mmmmhh ronroneaba como un gatito.

Se pasaría el día así, pasando de uno a otra, acuclillandose en los regazos templados y amplios :-) de sus papás.

Bueno ya veremos cómo van un par de dientes que tiene, parece, tocados por el golpe del otro día. Esperemos que no, que sea sólo una falsa impresión.

Noche serena... ya están todas en su camita.

Cómo costumbre sobre la una aparece en el estudio V. con su gran muñeco bajo el brazo. Ha pasado por el lavabo y ahora viene a solicitar el medio vaso de agua que su papá le llevará a tomar en la cocina y después en brazos hasta la cama, nuevamente.
Me saludará con una sonrisa que se difumina por el sueño que le cierra los ojitos rasgados.
Deliciosa repetición de gestos, seguridad y protección.

Toca después a la mayor, despertarse por la oportuna etapa en el baño.
¿Pero cuanto ha bebido esta niña? ¿3 botellas de agua?
Espectacular!!

A veces está tan dormida mi niña que no se da cuenta ni de donde está.
Me recuerda a mi mismo, cuando mi madre me despertaba, ya mayorcito, a veces sin levantarse ni de la cama, me llamaba un par de veces y un día abrí la cesta de la ropa limpia para planchar y mi madre se dió cuenta por la falta del ruidito que algo raro pasaba.

Robeeeertoooooo!!!!
Inolvidable desastre :-)

Después de haberla acompañada y metida en la cama, cuando la arropo, mi niña suelta una sonrisa de oreja a oreja de puro gozo, por ese simple gesto de colocar el edredón bien alrededor del cuello, dejando sólo la cabeza y el largo pelo negro, precioso que cubre entera la almohada...

y después ¿qué hacer?
meterse en la cama... no, todavía quedan un par de cositas para mirar y cerrar, aguanto un poco más y os lo cuento.

Buenas noches...

Comentarios

  1. Roberto, eso es lo más bonito de ser padres, es por lo que todo lo demás se olvida, mi hija María tiene 10 años y por un problema de euneresis infantil se hace pis en la cama, y cuando a media noche me levanto y me mira con esos ojitos diciemdo "mami otra vez", yo le digo no importa, ya aprenderas, entonces cuando la lavo y cambio la cama, me mira con esa carita y me sonrie, lo demás no importa.

    Un beso
    Paqui deccla

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