Aprovechar del viaje a tope

Hace unos días envié un mail a las familias que están a punto de recibir la asignación.
Hoy 16 de diciembre todavía nada por que como sabréis, y es que la ley de Murphy rara vez perdona: el paquete con tan preciada documentación este mes ha cogido el camino de Londres (y el paquete dirigido a Londres con las asignaciones llegó a Madrid, por lo que vuelta al Centro Chino y nuevo envío, con consecuente semanita de retraso...)

Antecedentes del mail: algunos papás y/o futuros papás me comentan, de vez en cuando, que todavía no han salido hacia China y ya tienen gana de volver a casa.
Es una actitud normal, el deseo de estabilidad es legítimo y comprensible.
Pero hay otros elementos a tener en cuenta.
Así que decidí comentar mi opinión sobre el viaje. Espero os sea útil.


Hola Familias:
Aprovecho de los mails de esta mañana para animaros a no pensar a la estancia en China cómo a un paréntesis que es mejor cerrar cuanto antes.
Hay que aprovechar del viaje, de la estancia, del país donde ha nacido nuestra hija/o.
Vivirlo a tope y pasarlo cuanto mejor sea posible.

La actitud con la que nos enfrentamos al viaje no es muy importante:
ES FUNDAMENTAL.

Sería una pena considerar esas dos semanas cómo algo que hay que cerrar rápido.
Ya sé que es absolutamente normal, legítimo y comprensible el deseo de recuperar la "normalidad" del día a día, el comfort de casa, la cercanía de parientes y amigos...

Pero el viaje es algo muy especial, es un momento precioso de nuestra historia y si lo vivimos con curiosidad, con la tranquilidad que da tener el apoyo de personas con experiencia, si nos fijamos en el valor de las vivencias que tendremos, todo sumará a ese activo muy valioso que podremos transmitir después, en el futuro, a nuestros hijos (y a nosotros mismos).

Esa seguridad sobre el valor del lugar donde han nacido que es posible necesiten en algún momento para superar críticas, comentarios, actitudes negativas que pueden llegar a sufrir.
Puede pasar.
Y si ellas y ellos, han sentido siempre un mensaje positivo en su casa de lo que es China, serán más fuerte para superar esos momentos sin grandes problemas o seguro con menores dificultades.

Si lo pensamos un momento, mucho empieza por este viaje y la estancia en China.

Si traeréis del viaje lo mejor de todo, si os quedáis con lo muchísimo de interesante, emocionante y especial que podréis ver y conocer en China, os será también mucho más sencillo expresar con sinceridad ese interés, respeto y hacia amor hacia el país que nos ha dado a nuestros hijos.

En todos nuestros viajes en China, y por nuestros hablo de los de mi familia, qué solo para ir a buscar las peques han sido tres! Siempre nos ha pasado volando el tiempo, siempre hubiésemos querido quedarnos un poco más.
Y hemos viajado dos veces en en las mismas fechas más o menos que os tocarán a vosotros. Diciembre y enero: brrrr qué frío :-)))

El viaje en avión es largo, y pesado, claro que sí. Los niños se cansan, los papás también, lloros, poco espacio etc. etc. pero es un trámite que hay que pasar y si nos lo tomamos con tranquilidad y filosofía pasará más rápido. Si en lugar de pensar a lo mal que estoy, pensamos a lo bien que nos trae ese vuelo tan incómodo, todo saldrá mucho mejor y serán mucho más llevaderas las incomodidades.

A la ida volamos hacia nuestros hijos, y a la vuelta ya llegamos a casa, las 12, 13 o 14 horas de vuelos son nada en comparación al tiempo de delicias que nos espera :-)

Los seres humanos tenemos un poder que utilizamos poco, el poder de influir en nuestras mismas sensaciones, de dirigir nuestro estado de ánimo, trabajando con nuestros sentimientos para concentrarnos en lo bueno que siempre existe en todo lo que hacemos y vivimos.
Nuestro problema, el de todos :-)) es que muchas veces hacemos lo contrario :-) nos dejamos llevar por la inercia de las malas sensaciones, nos olvidamos de repetirnos ¡¡no es para tanto!!
o ese:
¡¡mira que bonito!!
que nos llena de entusiasmo por lo que vemos y disfrutamos.

El hombre es el único ser vivo que sufre pensando en el dolor posible, que sufre cuando tiene el dolor y sigue sufriendo recordando lo mal que lo ha pasado... :-))
Rebelemonos y rompamos esta cadena!!

Y a disfrutar de China :-) que es un país realmente increíble!!!

Perdonad la extensión del mail :-))
menudo rollo que he soltado...


abrazos a todos
(y felices fiestas)
Roberto Pili

Comentarios

  1. Esta carta es una preciosidad.

    Roberto, te has superado. Me encanta. Ójala eso fuera lectura obligatoria para toda padre y madre que fuera al extranjero para buscar a un hijo.

    Recuerdo cada momento de mi estancia en China como una joya. Fue uno de los mejores experiencias de mi vida y tengo tanto que contar a mi hija como resultado de haber disfrutado cada cosa - los sabores, los olores, las calles, los monumentos, el té de jazmín, el buen trato de la gente de su pueblo natal, el taxista que nos llevó hasta allí contándonos su vida en el camino...

    Cierto es que hay que decidirse para tener una buena actitud porque cuando salimos de nuestro charquito siempre nos encontramos con cosas bien distintas que no siempre encajen con nuestras expectativas - pero es precisamente por eso que la experiencia es tan bonita.

    ¡Gracias por los buenos recuerdos que tu carta me recuerda de nuevo!

    Brenda

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  2. Hola Roberto.
    Coincido con Brenda que es una preciosidad.
    Al contrario que ella y vosotros yo, todavía no he viajado. Soy de las que pensaba que lo mejor del viaje era la vuelta.
    No por no apreciar todo lo bonito y diferente que hay en China para ver ya aprender.
    El motivo, comentado con otras familias, es el miedo a que, en algún momento del viaje, no nos dejen partir con nuestro precioso tesoro.
    Por favor sigue escribiendo cosas tan bonitas.
    Gracias
    Un abrazo,
    Mª Elena

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  3. Roberto, coincido contigo, el viaje a por nuestra hija lo tengo en muy buen recuerdo, lo pasamos en grande y si pudiera me iría ahora mismo otra vez (esperamos repetir cuando llegue la segunda asignación).
    Es un momento único lleno de un montón de sensaciones, en nuestro caso agradables, nos encantó.
    Feliz Navidad,
    Marta

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