Insisto

El circo mediático ha cruzado una vez más la línea del pudor y ha vomitado en los principios básicos del periodismo. En vez de utilizar una vara de medir lógica, la prensa ha jugado a provocar la histeria colectiva.

Lo escribe Gervasio Sánchez en el Blog Los desastres de la Guerra el 5 de mayo 2009

Cerca de 24.000 personas mueren diariamente de hambre, 3.000 de malaria, 3.500 de tuberculosis, algunas centenares de dengue. Éstos son los números de las verdaderas epidemias, pandemias o como se quiera llamar a lo que rodea nuestras vidas y las hacen más inestables.
Salvo excepciones, la gripe porcina ha provocado un regusto por el sensacionalismo en todos los medios de comunicación. La alerta sanitaria, lógica al producirse en un país tan deficiente desde el punto de vista médico como México, ha sido reconvertida en una amenaza galáctica como si el mundo estuviese a punto de enfrentarse a un virus mutante capaz de convertirnos a todos en primos de los cinematográficos Lobezno y los X-Men.

Sobra cualquier comentario. Ya se ha dicho y repetido, pero se continuará a repetir, porque la injusticia, la hipocresía y el cinismo no se ponen límites.

Dejen los gobiernos de olvidar los verdaderos peligros para la vida de sus gobernados.