La imagen de la Felicidad

No tengo fotos de esa"imagen", pero hace unos días mi mujer me hizo el resumen de la tarde, volví a las tantas a casa: daba una charla a las familias que pronto saldrán de viaje a buscar a sus peques a China.

Paloma está preparando un Manual de Instrucciones para padres de adolescentes.
Espero me de permiso de publicarlo. He intentado convencerla diciéndole que será un éxito seguro, y como a ella le encanta ser "The best" ( the bestia adorable, bromeamos...) a lo mejor lo consigo.
De momento nos ha adelantado algunos artículos, dicen:
- las mamás se quieren sólo a partir de las 22 horas, poco antes de irse a la cama, cuando es momento de cariñitos, antes no o muy difícil...
- no son permitidos más de 5 besos al día, y NUNCA en presencia de amigas!!
- Mi habitación es sagrada, hago allí lo que me da la gana.

En fin, a que promete ¿verdad?

Por cierto, que en el momento de comentar el punto de la habitación hubo algún tira y afloja. En estos casos, de vez en cuando, la adolescente repelente, con una sonrisa irónica, de las que expresan: preparate que voy a disparar (y que sí, merecería una foto :-), dispara:  que por supuesto su madre es la segunda o tercera, o quinta según le de, siendo la biológica la primera.

¿Pero cariño (dicho con tono jocosamente afligido...) , no habíamos quedado que tu verdadera madre soy yo?
(respuesta con sonrisa irónica y matadora) De eso nada, mi verdadera madre es la de China yo no tengo tus hormonas, pues no... eso, células... ¿cómo se dice?  moléculas...

¿serán genes?

Eso, qué más da. (y sonrisa de oreja a oreja :-)))

Mientras la pequeña a su aire, cantando a pleno pulmon y bailando, mientras disfruta de un libro de manualidades que le acaban de regalar, de vez en cuando se mira la hermana mayor mientras dice lo relatado y pone cara a su madre de ¿pero ésta qué dice?

Y con sus ocho añitos pasando de todo, la pura imagen de la felicidad.

¿Y Violeta?
Violeta en la bañera llena de espuma, con su pila de comics...

Ya llega la primavera y qué gustito da el sol, la luzy el calorcito.

Serenidad voy buscando, a veces hasta la encuentro, gracias a mis gamberras.