La influencia que tenemos
Me encantaría ser capaz de entender siempre las situaciones y las causas que llevan a ellas. Me esfuerzo por conseguirlo. Con toda la humildad del mundo. Hay que observar, con toda la humildad posible. Creo que se consigue, lo de entender, con observar lo que pasa alrededor nuestro sin aplicar permanentemente el rodillo de los prejuicios, idiosincrasias, manías y ese largo listado de etc., que contiene sustantivos y adjetivos de la zona lexical que atañe a la presunción y al ombliguismo. Nuestro ombligo, el centro del mundo. Cada vez que en alguna parte del cerebro se dispara el vicio de juzgar hago una pausa, levanto la mano: stop!! y pienso si lo que estoy juzgando es la situación o mi forma de ver las cosas. Evidentemente hay pocas posibilidad de éxito en este esfuerzo de imparcialidad. Por que siempre nuestra perspectiva, el prisma de nuestra visión influirá en nuestro juicio. Pero que no se llegue al máximo resultado deseado, no significa que tengamos que rendirnos...