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Pero es lo que hay y lo que tenemos que tener en cuenta.

Me refiero a las noticias que he leído en pocos días en España y en Italia y que relato más adelante.

Conozco a más de una (y de dos) familias que han adoptado en China que no valoran con suficiente atención la realidad evidente de que nuestras hijas tiene en la cara bien pintada su origen.
No se trata de agobiarse, ni de asustarse.
Pero el conocimiento y la aproximación a una exacta valoración de las cosas ayuda, sin duda, a encontrar una solución más rápida y eficaz también en las situaciones más difíciles.
Exactamente lo contrario a cuando por imprevista esa misma situación nos deja atónitos e incapaces de reaccionar para largo rato.

Dichos conocidos argumentan que por un lado no existe tanto racismo en contra de los chinos y en segundo lugar que nuestras hijas no son como un inmigrante cualquiera.
En otra palabras no tenemos que preocuparnos mucho: aunque se encuentren nuestras hijas cara a cara con algún racista antichino, el hecho de tener DNI español y haber entrado por la puerta grande in the Spain, les protegerá de la dureza del muro del racismo contra el que se estampan irremediablemente, por ejemplo, los negros o los chinos de verdad.

Nuestras hijas son chinas, y aunque con todo el esfuerzo que se merece la búsqueda del momento adecuado, de la mejor forma para decir las cosas etc., estaría bien que nuestras hijas estén preparadas al hecho de que hay algunos individuos que valoran el origen cómo muy importante pero "en negativo".

El racismo se manifiesta de muchas formas. Brutales y más sutiles...
No sólo en plan cabeza rapada que propina palizas.

En Madrid hace unas semanas apareció en la prensa la noticia que reflejamos en Panel de Noticias:

Un comerciante chino acusa a policías de agredirle en la puerta de una comisaría

A los pocos días algo parecido pasó en Milán en Italia, podéis ver un vídeo de las protestas que se generaron como reacción a la actitud de la Guardia Urbana de esa ciudad

publica el vídeo el periódico La República
(un comento interesante por quien lee el italiano en el BLog de Beppe Grillo)

Todavía no he olvidado los hechos de Elche, en el 2004 (más info).
No he olvidado los comentarios de un comerciante de la zona cercana a la calle Traflagar de BCN "sobre la invasión amarilla" y su particular sistema para combatirla...

Ni la escrita en la pared a lado de una tienda de productos chinos que decía exactamente así: "Chinos de Mierda fuera de Catalunya"

Ni los valiosos comentarios de un taxista, sobre un hecho de crónica que tuvo amplia resonancia en los medio. Argumentaba, el taxista, cómo el número tenía virtudes terapéuticas contra el dolor, es decir: la pérdida de un hijo en el caso de pertenecer a un país sobre poblado hacía que su madre "seguro" sufriera menos siendo los chinos un mogollón...

Estas palabras brotan de mi teclado empujadas también por lo escrito (y que os invito a leer) en Pasión por China

Es verdad que no hay que vendarse la cabeza antes de tenerla rota, pero todos sabemos que el casco protege de consecuencias más graves en una caída y que además en determinadas circunstancias es obligatorio!!

Comentarios

  1. UUFFF Roberto que razon tienes !!
    Yo solo espero que mi peque no se crea menos que nadie el dia que algun " @**##" le insulte o le diga algo malo sobre su raza, la verdad es que me gustaria si alguien le dice por ejemplo " oye tu CHINA.....ella sin ningun problema responda si, nací en China y que ?? o que se los mire con indiferencia y se de la vuelta.

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